Fuente: Cominidad Odinista de España - Ásatrú
CUESTIÓN 2ª.- ¿ES YULE UNA
CELEBRACIÓN SOLSTICIAL?
A estas alturas, puede que ya no
veáis tan clara la asociación de esta fiesta y el Solsticio. Aún así, sigue
dándose la concomitancia de las fechas: Yule coincide con el Solsticio de
Invierno, ¿verdad? Bueno, preguntemos a quienes escribieron sobre nuestro
Pueblo y su modo de vida, para saber cuándo se celebraba:
·
La pista más antigua sobre una gran fiesta
germánica invernal nos la da en el siglo VI el cronista bizantino Procopio, que
cuenta que los habitantes de Thule (Escandinavia) celebran una fiesta para que
el sol regrese, algún tiempo después del Solsticio de Invierno.
·
La primera referencia que tenemos al respecto de
la festividad de Yule propiamente dicha se encuentra en el poema del siglo IX Haraldskvæði,
compuesta en honor de Harald Hárfagri y su victoria en la batalla de Hafrsfjord
y la posterior unificación de Noruega: para ensalzar el talante llano del
monarca y su desprecio por las comodidades, el escaldo narra la intención del
rey de “festejar Yule bebiendo en el mar”, en lugar de hacerlo en la comodidad
de un hogar seco y tibio; aún así, no se menciona explícitamente que Yule se
celebrase en invierno (también averiguamos en ese texto que, al parecer,
muchas de las celebraciones religiosas de nuestros antepasados giraban en torno
al consumo de alcohol de un modo más o menos compulsivo).
·
En la Saga de Olaf Haraldsson, Snorri menciona
un blót realizado en mitad del invierno (en nórdico antiguo miðsvétrarblót),
al que llama Jólaveizla y Jólaboð, y ambas palabras vienen a
significar “Festín de Yule” o “Fiesta de Yule”.
·
El cronista sajón Tietmaro, a la sazón obispo de
Meserburgo, afirmó en una de sus crónicas que el blót más importante que
se celebraba en Lejre (Dinamarca) se realizaba en enero, pasada la Epifanía
(6 de enero).
·
En la Saga de Haakon inn Góði, se cuenta que
Yule es un evento que dura tres días, a partir de una noche llamada Hökunott,
ubicada en pleno invierno.
Pues me da la sensación de que no hay
consenso... Sin embargo, parece que se intuye el fallo, y es pensar que el
solsticio de invierno y el solsticio astrológico de invierno sean lo
mismo. Las características de cada estación varían en función de la latitud, y
nuestras tribus se expandieron a lo largo de todo el continente europeo. Las
festividades del moderno Odinismo suelen tomar como referente las fechas de las
celebraciones estacionales escandinavas, las cuales (atención), debido a su situación geográfica
y sus condiciones climáticas, se llevaban a cabo un mes después de los
solsticios y los equinoccios. De acuerdo con el calendario juliano (y tomando
como base los textos de Snorri, naturalmente), tendríamos una fecha para los
festejos de Yule rondando el 14 de enero, y si lo extrapolamos al moderno
calendario gregoriano (el que usamos habitualmente), nos da una fecha cercana
al 20 de enero. Así pues, tenemos un solsticio que ocurre el 21 de diciembre en
nuestro calendario, pero que en el calendario juliano correspondía al 14 de
diciembre, que coincide con la fiesta de santa Lucía (patrona cristiana de la
vista), y es por esto que, en el folklore escandinavo, aún se considera esa
noche como la más larga y oscura, a pesar de que, al cambiar el calendario, ya
no coincida con el solsticio. Es un poco complicado, lo sé, pero espero haberlo
explicado con un mínimo de claridad.
En la última parte del presente artículo, por fin, trataremos de desenmarañar este nudo gordiano de fechas y calendarios. Hasta entonces, ¡os agradezco la paciencia!
No hay comentarios:
Publicar un comentario